El cuerpo necesita vitamina C

El cuerpo necesita vitamina C para vivir y estar en óptimas condiciones. Esta vitamina ayuda a nutrir diferentes necesidades y procesos del cuerpo y es por ello que es tan valiosa también en el mundo del cuidado de la piel y el cabello.

La vitamina C es una molécula indispensable para los seres humanos. Misma que fue descubierta por el fisiólogo húngaro Albert Szent-Györgyi de Nagyrápolt, quien fue galardonado con el Premio Nobel de Fisiología o Medicina en 1937 por ese gran descubrimiento. 

De igual manera, es una molécula hidrosoluble (soluble en agua) presente en un gran número de frutas, verduras y hortalizas. En su estado puro es muy delicada, sensible y se degrada con mucha facilidad. Sin embargo, ha sido gracias a los desarrollos científicos que se ha logrado volver más resistente y estable para aprovecharla mejor.

Actualmente, podemos encontrar esta vitamina sintetizada bajo los nombres de ácido L-ascórbico o palmitato de ascorbilo en las listas de ingredientes de diversos productos tanto alimenticios, como cosméticos.

También, la vitamina C tiene propiedades antioxidantes, nos ayuda a eliminar sustancias tóxicas de nuestro sistema y es una fuente de energía. También, actúa como protector celular. Pues es esencial para muchas funciones metabólicas de nuestras células, en particular para la fabricación de colágeno. 

Esto es una especie de freno antienvejeciemiento, ya que el colágeno favorece junto con la elastina la correcta estructura de la piel. El primero aporta forma, firmeza y consistencia. Miemtras que la elastina flexibilidad. El colágeno es una de las proteínas más abundantes del cuerpo, constituye cerca de un tercio de las proteínas del cuerpo y sobre un 75% de la piel.

¿Cómo funciona la vitamina C sobre la piel y el cabello?

La vitamina C desempeña un papel clave en la lucha contra el envejecimiento de la piel, ya sea en el contexto del fotoenvejecimiento (por la exposición a la luz), el envejecimiento cronológico (por el tiempo) y el envejecimiento provocado por los radicales libres ya que protege al colágeno. Cuando un radical libre roba un electrón en las cadenas que forman el colágeno, éste crea una pequeña ruptura. Estos daños a lo largo de los años van acumulándose y hacen que el colágeno se dañe, lo que provoca la aparición de arrugas y flacidez en la piel.

Asimismo, los radicales libres hacen que el cabello se vuelva frágil y las puntas se quiebren fácilmente. Las propiedades antioxidantes de la vitamina C para el cabello ayudan a reducir los radicales libres, haciendo que el cabello sea más resistente.

Con la edad, el nivel de vitamina C presente en el cuerpo disminuye considerablemente, ralentizando todos los sistemas enzimáticos y la vida celular en general. Éstos envejecimientos se manifiestan por el adelgazamiento progresivo de la epidermis y/o del cabello, pérdida de elasticidad y resequedad.

El suministro de vitamina C de manera local es particularmente interesante para superar la falta de colágeno y para tener una acción directa sobre el envejecimiento que se acelera por la radiación ultravioleta, la contaminación, el tabaquismo, la mala oxigenación, entre otros. 

El cuerpo necesita la vitamina C

• Evita el envejecimiento prematuro (proteger el tejido conectivo, la “piel” de los vasos sanguíneos).
• Ayuda a aumentar la fuerza y elasticidad del cabello.
• Disminuye resequedad de la piel y el cabello.
• Facilita la absorción de otras vitaminas y minerales.
• Como antioxidante.
• Evita las enfermedades degenerativas tales como arteriosclerosis, cáncer, demencia, entre otros.
• Evita las enfermedades cardíacas.
• Tiene un papel fundamental en la formación de colágeno.
• Previene escorbuto, polio y hepatitis.
• Disminuye la incidencia de coágulos en las venas.
• Ayuda en los movimientos articulares.
• Acelera el proceso de curación de heridas, lesiones y quemaduras.

Cómo beneficia la vitamina C al cabello

• Ayuda a la creación de colágeno para fortalecer el cabello y evitar adelgazamientos o quiebres. Si el cabello está fuerte, no se rompe y por lo tanto estará más largo y sano. Ya que el colágeno promueve el crecimiento natural del cabello.
• Tiene una propiedad antioxidante que ayudará a la fibra capilar a estar más fuerte.
• Ayuda a crear aceites naturales para hidratar el cabello y evitar sequedad o deshidratación.
• Ayuda a prevención y detención de caída por adelgazamiento, o caída natural cíclica del cabello (efluvio telógeno)
• Ayuda a la producción de melanina, por lo que ayuda a retrasar la aparición de las canas. Pues, con la edad las células que crean el pigmento que colorean la melena envejecen.
• Ayuda a aumentar el flujo de sangre, y con ello, que nuestro cabello crezca más grueso y sano.
• Sin la vitamina C y todos sus beneficios para el cabello, tendremos un pelo fino, poco denso y hasta quebradizo.
• Puede ayudar a combatir la caspa limpiando el cuero cabelludo y dejándolo sin impurezas.

Tener una dieta rica en vitamina C ayudará a nuestro cabello, pero a veces no es suficiente, por lo que cuenta con productos capilares que tengan vitamina C.

Prueba usar la vitamina C en el shampoo y el resto de tu rutina capilar para mantenerlo fuerte y brillante.

Bibliografía

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